En el año 1992, tras cuatro años de éxito ininterrumpido gracias a “Mar i Cel”, la compañía catalana Dagoll Dagom quiso repetir su éxito con un musical mucho más ambicioso y espectacular que el anterior con su nuevo musical: “Flor de Nit”.

Un musical que nos narraba la historia la vida de Rosa, una trabajadora textil que viéndose despedida tras una revuelta obrera debe verse obligada a trabajar como cupletista en un cabaret de la Avenida del Paral·lel barcelonés, el “Flor de Nit”.

Para tratar de repetir el éxito de “Mar i Cel” contaron nuevamente con el compositor Albert Guinovart que realizó una partitura basada en los cuplés de la década de 1920 y 1930 y el libreto del escritor y periodista Manuel Vázquez Montalbán, célebre principalmente por sus novelas del investigador privado Pepe Carvalho con el que recorrió la Barcelona pre y post-olímpica con su afinado y amargo sentido del humor hasta su muerte en Bangkok en el año 2003, y que era un amante de la historia barcelonesa así de cómo de todo el panorama escénico de entreguerras y de la dictadura.

Desafortunadamente y pese a que todas las quinielas daban como vencedor el nuevo montaje de Dagoll Dagom fue recibido de forma desigual y en ocasiones éste fue definido como un musical con fuerte olor a naftalina para la sociedad barcelonesa de aquel 1992 que había dejado atrás ya los tiempos de la segunda república y del nada llorado franquismo.

No ha sido hasta ya de vuelta el siglo XXI, en pleno 2014 cuando una compañía de teatro se ha decidido volver a repetir un montaje del musical más incomprendido de los Dagoll. Así pues y gracias al esfuerzo de los Gataro y su Almería Teatre tenemos de nuevo “Flor de Nit” en la cartelera barcelonesa, en un montaje mucho más austero y oscuro que el original, que hizo uso de toda la artificiosidad de la que se disponía en aquel entonces. La gran compañía que originariamente la representó en el año 1992 se ha visto recortada únicamente a ocho intérpretes y a únicamente tres músicos la grandiosa orquesta de antaño. Un recorte que aunque pueda parecer drástico es justo el necesario para convertir “Flor de Nit” en “Flor de Nit: El cabaret”.

Un montaje de corte expresionista y elegante que con los oportunos recortes vuelve a contarnos la vida de Rosa, que no sólo se ve forzada a trabajar en un cabaret como método de subsistencia, sino que además se ve involucrada en las diferentes revueltas obreras y dictaduras de aquellos años hasta llegar a la fatídica guerra civil.

Los recortes y fusión de personajes funcionan a la perfección, así como el reajuste de viejos diálogos y tramas quitándole ese olor a naftalina del que se vio acusada entonces y dejándonos un nuevo y elegante espectáculo que hará las delicias de los amantes del cabaret y los musicales y que además se encuentra en las últimas semanas de representación.

Podéis haceros con las entradas en la web del teatro aquí.

Cabaret de Medianoche